El fantasma de la Ópera.

La foto que ilustra este post corresponde a la chimenea de la antigua Fábrica de la luz de mi ciudad natal,Ceuta. A través de ese entramado de casitas se llegaba al Cine de verano Terraza Apolo pero no es el sitio en si el objeto de lo que escribo, es el recuerdo que este sitio trae a mi mente. Debia de ser muy niño cuando, una noche de verano, camino del cine con mi madrina (me crié con ella en los primeros años de mi infancia, de los cuatro a los siete años aproximadamente), noté un poco alarmado que nos deteniamos en una pequeña casa de aquella zona y que procediamos a llamar a su puerta para entrar. Yo iba ilusionado con el cine y el "alto en el camino" no me gustó nada.

Entramos en aquella casa y nos recibió una Señora que saludó a mi madrina y me zampó un sonoro beso en la mejilla cosa que tampoco me gustó pues no era aficionado a las manifestaciones efusivas de extraños. Mi madrina le preguntó por el marido que cómo estaba y ella le contestó que bien pero que lo había pasado fatal y el buen señor salió de su dormitorio. Cuando lo vi el susto fue grandisimo pues me encontré con lo que parecia la representación del fantasma de la ópera todo vendado y nada mas que se apreciaban los ojos brillantes.El buen señor era de gran estatura y fuerte complexión y la impresión fue fenomenal. La verdad era que trabajaba en los transbordadores (Victoria y Virgen de África) y por accidente se cayó al agua enganchandolo las hélices con lo que estuvo a punto de perder la vida pero el susto también me lo dió a mi.

Cosas y costumbres de la época pues hoy no se nos ocurre llevar a un niño a ver a un señor en ese estado ni tampoco crfeo que ningún chico de nuestra época sea tan impresionables pero... eran otros tiempos.